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"Soy un hombre de armas, un soldado, scout. Paradójicamente, al único de mi especie que admiro, empuñó solamente la palabra, su técnica fue la humildad, su táctica la paciencia y la estrategia que le dio su mayor victoria fue dejarse clavar en una cruz por aquellos que amaba".

“Espíritu Santo, inspírame lo que debo pensar, lo que debo decir, lo que debo callar, lo que debo escribir, lo que debo hacer, como debo obrar, para el bien de los hombres, de la iglesia y el triunfo de Jesucristo”.

Desde La Trinchera Del Buen Combate en Argentina. Un Abrazo en Dios y La Patria.

4 de enero de 2012

CUIDAR LAS MASCOTAS PERO SIN OLVIDAR A NUESTROS HERMANOS


“Entiendo perfectamente la situación de personas solas o personas mayores que tienen en sus mascotas una compañía, depositan en ellas y de ellas reciben cariño; eso me parece perfectamente razonable. Le puede hacer bien a un chico crecer con una mascota cerca, pero será incomparablemente mejor si crece rodeado de hermanitos. El hombre, a lo largo de la historia, ha domesticado a los animales, los ha acercado a él pero no se los puede convertir nunca en humanos”, expresó el arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, en su reflexión televisiva semanal, en el programa “Claves para un Mundo Mejor” emitido el sábado último por América TV.

Esta reflexión surgió a raíz de una información que señala que en la Argentina “el año pasado se gastaron 645 millones de pesos en compra de productos para mascotas”, cifra que -confesó el arzobispo platense- lo “dejó perplejo”, pues hay “tantas necesidades fundamentales que no son advertidas en la sociedad argentina y en el mundo entero” y puso como ejemplo “lo que ocurre en Europa, donde la caída de las tasas de natalidad es un fenómeno terrible. Y eso está proporcionalmente ligado al cuidado de las mascotas y al gasto que se hace en ellas”.

Reconoció que “esto puede darse en determinados niveles de la sociedad. Por las calles de las grandes capitales europeas se ven pocos niños, pero muchos perritos elegantes”.

“Todos sabemos que ahora las atenciones que reciben nuestros perritos y gatitos son múltiples. No solamente para mantenerlos en buen estado de alimentación, de belleza, la necesaria vacunación, medicinas y cirugías cuando es necesario y demás. Todas cosas que antes no existían”.

“Por supuesto que, en principio, yo no tengo nada contra eso pero la cuestión es: ¿no habrá un desbalance en este presupuesto?”.

“Creo que hay un desnivel en el gasto del dinero que la gente tiene cuando uno advierte las necesidades tremendas no satisfechas que perduran hoy día. Tantos chicos nuestros que viven en una situación más precaria que muchísimas mascotas”.

¿No vivimos, quizás, demasiado encerrados en nuestro pequeño mundo, en nuestras pequeñas satisfacciones? Ese cariño que se dispensa a las mascotas y que no hay por que cercenar, ¿no tendría que equilibrarse un poco con una inquietud mayor y con algún gesto solidario respecto de tantas personas que padecen necesidades enormes, elementales?”.

“¿Una mascota puede llenar la vida a una pareja joven? La vida se la llena verdaderamente un hijo. ¡Y varios hijos! Aunque todos sabemos que tener un hijo y poder educarlo bien, hoy día cuesta y cuesta enormemente”.

“Tengamos en cuenta que no vivimos aislados. Por más solos que estemos participamos de una sociedad de la cual somos miembros vivos y, especialmente, si somos cristianos participamos de la gran comunión de la Iglesia. La caridad tendría que brindarse de un modo prioritario allí donde las necesidades son más urgentes. Sin duda podemos querer mucho a nuestras mascotas pero no son estrictamente hablando nuestro prójimo”.

“A propósito de esto: parece que en algunos ambientes de filosofía jurídica se está hablando del derecho de los animales y es una expresión que no corresponde. Los animales por más que tengamos que cuidarlos, como tenemos que cuidar a toda la creación, no son sujeto de derecho”.

Monseñor Aguer concluyó su reflexión diciendo: “Todas estas cosas tienen que ser objeto de un equilibrio superior, y en ello queda implicada la idea que uno se hace del mundo, de la vida, de la relación con los demás”.+
La Plata (Buenos Aires), 28 Nov. 11 (AICA)

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